Vivimos en el fraude
Hasta que nos topamos en una vitrina de improviso con la realidad.
Fascinante paradoja Joaquin:
En "Dieguitos y Mafaldas", encontramos a Sabina de 50 años celebrando un romance con una joven de 19 ("20 años cosidos a retazos"), donde todavía juega al seductor, al aventurero. La letra está llena de vitalidad, deseo y arrogancia ("Sus huesos son sobrinos de mis huesos").
Es el Sabina que aún se permite jugar a ser el eterno adolescente, el que persigue amores imposibles.
En contraste, "Sintiéndolo mucho"
el envejecimiento.
abandona el seductor admite vulnerabilidad
("Aunque al fusil ya no le queda ni un cartucho").
La paradoja:
primera canción pretende escapar de su edad en romance juvenil
segunda canción encuentra dignidad "envejecer sin dignidad"
El poder del dinosaurio
reírse de si mismo.