La poesía para mí es una batalla contra la capacidad humana de olvidar- que es infinita-.
Por ejemplo olvido tu boca, mis manos, tus dedos en mi boca.
Recuerdo cuando mis pies se enfrascaron en una fuerte discusión talón a talón, invocando la responsabilidad de cada uno de hacer su trabajo y avanzar.
Luego invoco la poesía y le exijo a mis ojos lucidez y veo mis lentes en su presencia irreversible.
Veo la poesía y mis heridas y como cantaba Charly Garcia: curé mis heridas y encendí de amor.
Sin embargo, sangro no sé por dónde siembro y sigo.
